Acuden aproximadamente 1.700 participantes, de los cuales 300 enfermos

Se ha concluido el domingo pasado la tradicional peregrinación de la Soberana Orden de Malta al Santuario de la Virgen de Loreto, que se celebra cada año a finales de octubre. Aproximadamente 1.700 miembros y voluntarios de la Orden de Malta han asistido a más de 300 enfermos durante los tres días de peregrinación y oración en el santuario mariano italiano. Han asistido quince delegaciones de los tres Grandes Prioratos de Italia.

El Lugarteniente del Gran Maestre, Frey Giacomo Dalla Torre del Tempio di Sanguinetto, ha presidido la peregrinación de este año acompañado del Consejo Soberano; las ceremonias religiosas más importantes han sido confiadas al cardenal Paolo Sardi, Cardenal Patrono, y al arzobispo Angelo Acerbi, Prelado de la Orden.

El viernes por la tarde, los peregrinos han sido recibidos por el arzobispo de Loreto, monseñor Fabio Dal Cin, que en el transcurso de la eucaristía en la Basílica ha dirigido palabras de profundo agradecimiento a la Orden por su trabajo.

«A lo largo de su existencia milenaria, a través de las dificultades de la historia que no han faltado, la Orden de Malta ha sabido siempre dirigir su atención a quienes, en las distintas épocas históricas, eran considerados débiles y pobres, asistiendo, defendiendo y asistiendo a los necesitados y los marginados, al servicio de la Iglesia y por amor y defensa de la fe en Jesucristo, como afirma el propio lema de la Orden: Tuitio Fidei et Obsequium Pauperum”. El arzobispo ha animado a los miembros y voluntarios de la Orden de Malta a proseguir en sus misiones de asistencia a los enfermos y las personas que padecen violencia, persecución o desastres naturales.

La peregrinación al Santuario de Loreto se caracteriza por la presencia de niños y jóvenes. Este año han sido 170, con edades entre los 4 y los 16 años, los que han ayudado a transportar y acompañar a los peregrinos asistidos, además de prestar su ayuda en el comedor con gran eficacia y entusiasmo.