Tres días después del devastador terremoto de magnitud 7,8 que ha sacudido la región situada entre el sur de Turquía y el norte de Siria -con epicentro en la región de Kahramanmaras-, todavía no han cesado las operaciones de rescate. El balance de víctimas sigue empeorando, con más de 16.000 muertos y 63.000 heridos, y preocupan las condiciones de los supervivientes, aún más complejas por las heladas, la nieve y la lluvia. Según la Organización Mundial de la Salud, unos 23 millones de personas se han visto afectadas por las consecuencias del terremoto en Siria y Turquía.

El equipo de ayuda de Malteser International ha llegado a Gaziantep, en la frontera entre Turquía y Siria, donde la organización de ayuda internacional de la Orden de Malta presta ayuda desde el estallido de la guerra en Siria. Esta región acoge a miles de sirios desplazados: tras el devastador terremoto, muchos de ellos han perdido lo poco que habían reconstruido tras huir de la guerra.

En la actualidad, Malteser International presta apoyo a seis hospitales, un hospital materno-infantil y ocho centros de atención primaria en las regiones de Idlib y el norte de Alepo, en el noroeste de Siria. Turquía gestiona los proyectos de ayuda en la región fronteriza con Siria. Oliver Hochedez, coordinador de la ayuda de emergencia de Malteser International, está en contacto permanente con los colaboradores que atienden a las personas afectadas por el terremoto en el noroeste de Siria.

«Afortunadamente, los hospitales a los que apoyamos en el noroeste de Siria solo han sufrido daños leves y están plenamente operativos, pero falta material médico, botiquines de primeros auxilios, equipos de traumatología y fármacos. Los médicos que trabajan en los hospitales que apoyamos llevan trabajando al límite de su capacidad desde el lunes por la mañana. Incluso antes del terremoto, la atención sanitaria para la población de esta región estaba en situación crítica. Estamos trabajando a toda velocidad para conseguir los productos necesarios lo antes posible. Las necesidades médicas son ingentes, sobre todo es importante conseguir material ortopédico para los numerosos heridos», informa Oliver Hochedez, coordinador de la ayuda.

Por otra parte, dos camiones con un total de 10 toneladas de material de ayuda, como camas, tiendas de campaña, mantas y colchones para las personas afectadas en Turquía, saldrán hoy de Hannover y Speyer, en Alemania, y ya están en preparación otros envíos.

Malteser International coordina desde 2012 varios proyectos para los refugiados sirios, y gestiona instalaciones sanitarias y campos de refugiados en el noroeste de Siria, donde la situación es especialmente delicada. La mayoría de las personas afectadas por la catástrofe son mujeres y niños. Además del drama del terremoto, las comunidades sirias sufren actualmente una epidemia de cólera.

Mientras tanto, el ministerio de Asuntos Exteriores alemán ha destinado un millón de euros a los equipos de emergencia de Malteser International. Estos fondos destinados a la población siria servirán para conseguir material de ayuda como mantas, colchones, tiendas de campaña y alimentos.

Malteser International también coordina las operaciones de ayuda de las demás entidades de la Orden de Malta que participan en los esfuerzos de solidaridad. La Asociación libanesa está preparando el envío de una clínica móvil y un cargamento de ayuda humanitaria. Ordre de Malte France y el servicio de ayuda de la Orden de Malta en Hungría se han movilizado también, enviando un equipo médico en una clínica móvil.