Tras el fuerte terremoto que sacudió anoche la frontera entre Türkiye y Siria, el gobierno turco ha pedido ayuda a la comunidad internacional. El seísmo tuvo una magnitud de 7,8 en la escala de Richter. Hay más de 1.000 víctimas mortales en ambos países, según la información disponible hasta el momento. Sin embargo, las cifras aumentan con rapidez y los edificios residenciales y las infraestructuras han sufrido daños considerables. Malteser International, la organización de ayuda internacional de la Orden de Malta, ha enviado un equipo de ayuda de emergencia a la región afectada.

«Los compañeros de Gaziantep y Kilis nos informan de la enorme destrucción causada por el terremoto. Nuestro equipo de ayuda de emergencia ya ha sido enviado a la región: nuestros socios locales necesitan ayuda urgente, especialmente en las zonas de refugiados del norte de Siria, donde cientos de miles de personas viven en refugios precarios y han quedado desprotegidas tras el terremoto. Las temperaturas en la región son gélidas y llueve copiosamente. En los hospitales de las organizaciones que colaboran con nosotros, el número de heridos por el terremoto aumenta cada hora. Así que tenemos que llegar rápidamente con ayuda», afirma Oliver Hochedez, coordinador de la ayuda de emergencia de Malteser International.

El equipo de emergencia está tomando las primeras medidas inmediatas y luego se encargará de enviar el material de ayuda que la población necesita con urgencia.

Desde 2012, Malteser International presta su apoyo a las infraestructuras sanitarias y de saneamiento y suministro de agua en Siria a través de sus socios locales, y ofrece asistencia a los refugiados sirios en Türkiye.

Photo-Credit: ANSA/EPA y Malteser International