El primer ministro libanés, Najib Mikati, ha mantenido esta mañana un encuentro en el Palacio Magistral con el Gran Canciller de la Soberana Orden de Malta, Riccardo Paternò di Montecupo. Tras la reunión, el primer ministro ha sido recibido por el Lugarteniente del Gran Maestre, Frey John Dunlap.

En las conversaciones, en las que ha participado el Gran Hospitalario Frey Alessandro de Franciscis, se han reafirmado las excelentes relaciones selladas por 70 años de relaciones diplomáticas. El primer centro médico data de 1957, mientras que la Asociación inició sus programas de asistencia médica y social en 1981. Desde entonces, la Orden de Malta ha desempeñado, y sigue desempeñando hoy, un papel clave en el país de los cedros, asolado por una guerra civil de 15 años y graves crisis sociales y económicas.

«La Orden de Malta realiza una excelente labor en mi país», ha declarado el primer ministro Mikati, haciendo hincapié en la complicada crisis que atraviesa Líbano y señalando: «Las prioridades de mi gobierno son la educación y la sanidad. Una de nuestras prioridades es conseguir elegir al presidente de la República, cargo que está vacante desde el pasado mes de octubre».

En el encuentro también se ha tratado la cuestión de los corredores humanitarios hacia Siria, aún más indispensables tras el terremoto del pasado mes de febrero.

El Gran Canciller ha reiterado que «Líbano está en el corazón de la Orden de Malta. Estamos preparados y dispuestos a hacer todos los esfuerzos posibles para intensificar nuestros programas médicos y sociales». Está previsto que en los próximos días se celebre una reunión en Beirut entre el primer ministro Najib Mikati y el presidente de la Asociación libanesa, Marwan Sehnaoui, para hacer balance de la situación y coordinar los esfuerzos».

Desde 2019, Líbano vive de nuevo una catástrofe humanitaria agravada por la pandemia y la explosión en el puerto de Beirut en agosto de 2020. La crisis económica ha debilitado gravemente el sistema sanitario: escasean los fármacos y medicamentos básicos en el comercio, los hospitales y las farmacias. La población ya no puede permitirse recibir atención médica y cada vez es más necesaria la ayuda humanitaria. La tasa de inflación ha alcanzado en Líbano niveles dramáticos, con un aumento anual del índice de precios al consumo (IPC) del 123,5%.

La Orden de Malta en Líbano está a la vanguardia en la prestación de asistencia médica y social a las personas más vulnerables gracias a sus 11 centros y sus proyectos sociosanitarios en repartidos por todo el país. A esto se suman sus siete clínicas móviles activas, que llegan a las zonas más remotas del país. La Asociación libanesa de la Orden de Malta también organiza campañas de prevención y concienciación contra el cáncer y las enfermedades cardíacas, y cuenta con programas de asistencia a mujeres embarazadas. La Asociación ha inaugurado recientemente un nuevo centro de salud en Beirut, capaz de atender hasta 500 pacientes al día.

Existen también proyectos específicos para ancianos y personas con discapacidad, con especial atención a los niños con discapacidad intelectual. Todos los años se organizan campamentos de verano para jóvenes y niños con discapacidades graves, en los que participan cientos de voluntarios de la Orden de Malta de todo el mundo. En los últimos años, la Asociación también ha lanzado proyectos en el ámbito agrohumanitario, cuyo objetivo es apoyar a los agricultores y a la economía local.

Todas las actividades de asistencia están respaldadas por acuerdos bilaterales que enmarcan la cooperación sanitaria y humanitaria entre el gobierno libanés y la Soberana Orden de Malta. El primer acuerdo de cooperación data de 2009.

También son de gran valor los proyectos sociales desarrollados en estrecha colaboración con otras confesiones religiosas presentes en el país, como la institución suní Dar El Fatwa, la Fundación El Sadr (una de las ONG chiíes más influyentes) y la Fundación Sheikh Abou Hassan Aref Halawi, considerada la principal y más respetada institución dentro de la comunidad drusa.