El Prelado se reúne con miembros del servicio de ayuda de la Orden y visita algunos de sus proyectos
En respuesta a la invitación de la Asociación rumana de la Orden, el Prelado de la Orden de Malta, monseñor Jean Laffitte, ha visitado por primera vez el país a principios de octubre. Allí ha podido entrevistarse con miembros de la Asociación y representantes del serviciul de Ajutor Maltez în România (SAMR), el servicio de ayuda de la Orden de Malta en Rumanía.
A su llegada a Cluj Napoca, ha podido visitar la sede del servicio de ayuda, donde se ha informado sobre sus numerosos programas de ayuda a los necesitados, desde los ancianos a los niños desfavorecidos, pasando por las personas discapacitados y las comunidades romaníes de la región. El servicio opera en 26 municipios, con 1.000 voluntarios y 100 trabajadores que gestionan proyectos que benefician a más de 4.000 personas cada año. Entre las actividades en Cluj se cuentan una guardería para niños discapacitados y un programa de actividades extraescolares para integrar a los jóvenes en situación vulnerable.
Al día siguiente se ha reunido con François Catto, presidente de la Asociación rumana de la Orden de Malta, con Roberto Musneci, embajador de la Orden, con miembros y capellanes y con voluntarios y beneficiarios. En su visita a Blaj, ha acudido a la oficina local del servicio de ayuda, que dirige un centro de día para niños discapacitados, donde ha podido charlar con voluntarios y varias de las familias beneficiarias. A continuación, se ha reunido con el obispo de la diócesis de Alba y Fagaras, y ha visitado la famosa capilla de 1532, para después desplazarse hasta Sumuleu Ciuc, el santuario mariano más importante en Rumanía.
El día de San Francisco, monseñor Laffitte ha celebrado la misa en la capilla del servicio de ayuda en Sfantu Gheorghe, la mayor delegación de la organización. El destino final ha sido Bucarest, donde ha impartido una conferencia sobre la espiritualidad de la Orden de Malta y se ha entrevistado con el obispo auxiliar de la archidiócesis católica romana y una misa en el monasterio carmelita de Ciofliceni.
© Calin Piescu
