Malteser-International-es, la organización de ayuda internacional de la Orden de Malta, ha puesto en marcha un proyecto en 23 colegios de Sudán del Sur para explicar a las estudiantes cómo evitar contagiarse por coronavirus. Se hace mediante sesiones de formación y juegos para las alumnas y el personal docente. En uno de los juegos se colocan cartas boca abajo sobre la mesa, un póster con dibujos pintados debajo, y cinco estudiantes se colocan alrededor de la mesa y buscan las parejas que corresponden a los dibujos del póster. Recuerda un poco a los juegos de memoria para niños. «Siempre hay una tarjeta que muestra cómo debes actuar y otra que muestra lo que no debes hacer. Tienes que descubrir estas parejas y luego compararlas con las imágenes del póster», explica a los niños Wani Robert Lou, formador en higiene de Malteser-International-es.
El juego no sólo pretende aportar algo de variedad a sus lecciones, sino sobre todo mostrarles cómo pueden contagiarse por coronavirus.
«Las imágenes les dejan claro lo que deben hacer. Mantener la distancia, llevar mascarilla, lo ven en las imágenes y a través de las repeticiones lo recuerdan. Es una buena idea para sensibilizar a los niños», dice Joseph Ayella, director de la escuela.
Tras el largo confinamiento, muchas niñas no volvieron al colegio
Las cifras de contagios por coronavirus en Sudán del Sur no son especialmente elevadas. Según datos oficiales, hasta diciembre de 2021 hubo 12.804 contagiados y 133 fallecidos por coronavirus. Sin embargo, es probable que el número de casos no declarados sea mucho mayor, porque no se realizan muchas pruebas en el país.
La pandemia de la covid-19 ha tenido sobre todo consecuencias económicas. Desde el comienzo de la pandemia, se han repetido los confinamientos y ha habido restricciones a los desplazamientos; las tiendas y los mercados estuvieron cerrados durante meses en 2020. La moneda se ha devaluado, y muchas personas ya no saben cómo alimentar a sus familias.
Las escuelas estuvieron cerradas durante un año entero, y esto también ha tenido consecuencias, dice Jennifer Louis, de 14 años: «Muchas chicas de nuestra escuela no volvieron después de los cierres», explica. «Se casaron y se quedaron embarazadas. Nadie sabía cuándo volverían a abrir las escuelas. Las chicas pensaban que si se cerraban las escuelas, no tendrían más remedio que casarse».