Promover la cohesión social superando las desigualdades acentuadas por la pandemia, reactivar el papel que las instituciones y organizaciones religiosas desempeñan en la gestión de las situaciones de crisis, como la sanitaria, y de conflictos, y hacer hincapié en el respeto de los derechos humanitarios. Estos son los conceptos que resumen las aportaciones de la Soberana Orden de Malta en el Foro Interreligioso del G20 que se celebrará del 12 al 14 de septiembre en Bolonia, uno de los eventos organizados por el G20 presidido por Italia.

El Foro Interreligioso del G20 es la plataforma anual que reúne a organizaciones interreligiosas e interculturales, líderes religiosos, académicos, agencias humanitarias, representantes gubernamentales e instituciones internacionales, con el objetivo de estudiar las cuestiones sociales, económicas y políticas para informar a los gobiernos y los programas globales.

«Apoyar el papel de las instituciones religiosas, facilitar el diálogo interreligioso, sobre todo en Oriente Medio, y promover el derecho internacional humanitario son algunos de nuestros principales objetivos actuales. Ante los crecientes movimientos xenófobos y populistas, la Orden de Malta ha lanzado innumerables llamamientos en la comunidad internacional para defender la dignidad y los derechos humanos»: son las palabras del Gran Canciller de la Orden de Malta, Albrecht Boeselager, que participará en la sesión inaugural del lunes 13 de septiembre, titulada Política exterior y religiones.

«Nos sentimos, por tanto, especialmente satisfechos de participar en este importante encuentro que pretende fomentar la cohesión social, abordar las desigualdades y curar las heridas, tanto físicas como espirituales, que son el resultado de un momento especialmente difícil e incierto», añade Boeselager.

El tema inspirador de la edición 2021 del Foro de Diálogo Interreligioso del G20 es «Tiempo de sanar» (Time to heal), tras una etapa histórica especialmente turbulenta, marcada por grandes incertidumbres y temores ante el futuro. Sanar las heridas causadas por la pandemia, pero también las heridas sociales que han afectado principalmente a los débiles y a los pobres, empujándolos aún más a los márgenes de la sociedad y privándolos a menudo de su dignidad. El concepto de curación implica, por consiguiente, una visión holística en la que mente, cuerpo y espíritu están intrínsecamente unidos. Este enfoque es típico de la labor de la Orden de Malta, que durante nueve siglos ha estado al servicio de los más débiles y necesitados.

La Orden de Malta participará en numerosos paneles centrados en el respeto de los derechos humanos, en la trata de personas y los nuevos equilibrios geopolíticos. También presentará el Pacto sobre las Religiones, un documento elaborado en colaboración con representantes de las confesiones cristiana, judía y musulmana. El Pacto engloba los principios y valores comunes de las tres grandes religiones monoteístas y pretende ser una herramienta para orientar a los líderes y organizaciones religiosas que desempeñan un papel fundamental en las zonas de crisis, convirtiéndose a menudo en los únicos interlocutores verdaderamente fiables en la medida en que conocen el tejido social en el que actúan.

En la conferencia, a la que asistirán unas 300 personas y un centenar de autoridades políticas y diplomáticas, se debatirán los principales temas de actualidad: la crisis provocada por la pandemia, la dramática situación humanitaria en Afganistán y sus consecuencias en el escenario geopolítico asiático. Concluirá con un discurso del primer ministro Mario Draghi.