La digitalización de la asistencia médica y el avance de las tecnología asistenciales: estos han sido los temas centrales de la conferencia organizada por la Orden de Malta hoy, en la Villa Magistral de Roma, titulada E-salud: de las experiencias actuales a las oportunidades futuras. Los temas principales de la conferencia, que ha sido retransmitida en directo, han sido la drástica transformación que ha experimentado la medicina como consecuencia de la pandemia de la covid-19, que, como ha afirmado el Gran Hospitalario de la Orden de Malta Dominique de La Rochefoucauld-Montbel en su discurso de apertura, ha «acelerado el uso de las nuevas tecnologías y desarrollado otras». El Gran Hospitalario ha hecho hincapié en los numerosos campos multifacéticos que abarca la sanidad electrónica, como los sitios web de información relacionada con la salud, los tratamientos automatizados en línea, las consultas por correo electrónico, las farmacias en línea, la telesalud, los sistemas de seguimiento virtual y las clínicas digitales.
Pierpaolo Sileri, subsecretario de Sanidad italiano, también ha participado en el debate destacando la importancia de la recopilación de datos como herramienta esencial para orientar a los políticos y a los responsables, especialmente tras una pandemia. «El objetivo de no dejar a nadie atrás debería ser un imperativo para los gobiernos de todo el mundo», ha declarado Sileri. «Por eso es importante estudiar cómo facilitar el acceso a la e-salud, no sólo como proyectos aislados, sino como iniciativas con un marco compartido y sólido. La cooperación internacional es esencial para garantizar la igualdad de acceso a los servicios sanitarios para todos a nivel mundial».
Malteser-International-es, la organización de ayuda internacional de la Orden de Malta, ha presentado el ejemplo de Líbano, donde, como ha explicado la responsable del programa de Oriente Medio Janine Lietmayer, la digitalización de las unidades médicas móviles que operan en el país ha conllevado una recopilación de datos más eficiente, ordenada y eficaz, que a su vez ha permitido aumentar el número de personas atendidas diariamente y mejorar la calidad de la consulta entre médico y paciente.
Antes de la clausura, monseñor Vincenzo Paglia, presidente de la Academia Pontificia para la Vida, ha compartido su opinión sobre la importancia de la atención especializada en pacientes terminales, recordando la tragedia de las víctimas de la covid-19 fallecidas en soledad.
A la conferencia ha asistido también, a distancia, el ministro de Sanidad de la República de Benín, Benjamin Hounkpatin. Han intervenido igualmente Elena Bottinelli, responsable de innovación y sostenibilidad de San Donato Group, Till Berger y Julia Opstals, de la empresa tecnológica alemana Allm EMEA, Giovanni Ferigo, director general de INWIT, y Edmund Le Brun, de Elephant healthcare.
