La Soberana Orden de Malta ha nombrado recientemente a dos nuevos embajadores cuya misión será luchar contra la trata. Basados en Ginebra (Suiza) y en Lagos (Nigeria), Michel Veuthey, embajador para la supervisión y la lucha contra la trata de seres humanos, y Romain Champierre de Villeneuve, embajador especial para África, ayudarán a reforzar el compromiso de la Orden de Malta contra la trata de seres humanos y de protección a las víctimas, a través de proyectos locales y a nivel diplomático.
En la primera reunión que celebraron ayer con el Gran Canciller Albrecht Boeselager en el Gran Magisterio, los nuevos embajadores definieron una serie de objetivos para reforzar los vínculos con actores internacionales implicados en la lucha contra la trata y en la concienciación sobre este problema que aumenta en alcance y dimensión, a medida que aumenta el número de desplazados en el mundo.
Según la Organización Internacional del Trabajo, en el mundo se cuentan ya 20,9 millones de víctimas de la trata de seres humanos. El 68% de ellas son víctimas de trabajo forzoso. La trata se ha convertido en un gran negocio, con beneficios anuales que superan los 150.000 millones de dólares americanos, y la mayor parte de él está arraigado en los países en desarrollo. El 55% de las víctimas son mujeres y niñas, y los menores de 18 años representan el 26% del total. La pobreza, las guerras, el cambio climático, la discriminación de castas y la desigualdad de género forman un terreno fértil para la esclavitud moderna.
Basándose en la experiencia adquirida en los programas de ayuda a migrantes y refugiados, que la Orden lleva años desarrollando en distintas zonas del planeta, uno de los primeros compromisos de la Soberana Orden de Malta será el de participar, los días 27 y 28 de septiembre, en la Reunión de Alto Nivel sobre la Evaluación del Plan de Acción Mundial de la ONU para Combatir la Trata de Personas, que la ONU adoptó en julio de 2010.
Michel Veuthey y Romain Champierre de Villeneuve presentarán después su misión y establecerán una red de trabajo en una reunión de embajadores y trabajadores humanitarios de la Orden de Malta, en especial en el continente africano, que se celebrará en París en octubre.
Este compromiso reforzado de la Orden de Malta responde al llamamiento realizado por el Papa Francisco para detener el trabajo forzoso, la esclavitud moderna y la trata de personas, tal y como monseñor Paul Gallagher manifestó recientemente ante la 72ª Sesión de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York. Un fenómeno despiadado que la Orden ha constatado de primera mano, en sus numerosos proyectos de asistencia a desplazados en sus países de origen, tránsito y acogida.