“En estos tiempos dramáticos en los que la guerra y el terrorismo se extienden por Oriente Medio y África, millones de personas se ven obligadas a huir y buscan refugio en Europa”, ha declarado el Gran Canciller de la Soberana Orden de Malta, Albrecht Boeselager. “Inspirada por el principio de solidaridad y por el imperativo ético de aliviar el sufrimiento humano, la Orden de Malta ha intensificado sus esfuerzos para acoger y prestar asistencia a los refugiados”, ha explicado el Gran Canciller.
Con su red de 80.000 voluntarios en todo el mundo, sus asociaciones nacionales y sus cuerpos de ayuda, participa en las ingentes acciones desplegadas para ofrecer atención médica, alojamiento y bienes de primera necesidad a las miles de personas huidas.
El servicio de asistencia de la Orden de Malta en Hungría ha triplicado sus esfuerzos para prestar asistencia médica a los refugiados que atraviesan el suelo húngaro con la esperanza de llegar a otros destinos en Europa. Desde primeros de agosto, los voluntarios se han situado en las principales estaciones de Budapest, Győr y Szeged, en la frontera con Serbia. Allí prestan asistencia médica, y en Budapest gestionan un albergue de acogida creado para hacer frente a la emergencia. A petición del gobierno húngaro, el servicio de asistencia de la Orden de Malta ha participado también a principio de septiembre en las operaciones de transporte de los refugiados hasta la frontera con Austria.
En Alemania se han instalado 30 estructuras en todo el país, donde se ofrece asistencia médica y legal a los solicitantes de asilo. En 2014 aproximadamente la mitad de los refugiados presentes en Alemania recibió asistencia en las estructuras gestionadas por la Orden de Malta, creadas para ese fin. A raíz de las llegadas masivas de las últimas semanas, la Orden ha intensificado su acción, y ha dispuesto aproximadamente 70 alojamientos de emergencia operativos, con capacidad para albergar a 50.000 refugiados. Se han movilizado 1.600 voluntarios para la distribución de productos de primera necesidad, tiendas y mantas. Los médicos y enfermeros voluntarios de la Orden asisten a los refugiados que llegan a las principales estaciones ferroviarias, de Berlín a Mónaco. Justamente en Mónaco, donde sólo durante el último fin de semana se han registrado más de 19.000 llegadas, la Orden de Malta se ha unido a organizaciones humanitarias locales y a los servicios de protección civil para instalar, a petición del gobierno federal, un centro de seguimiento y comunicación para coordinar las actividades de asistencia médica, de acogida y de alojamiento de los refugiados.
Desde principios de agosto el servicio de asistencia austriaco de la Orden de Malta ofrece tratamientos y atención médica a centenares de refugiados acogidos en un campo provisional en Innsbruck, en el Tirol. En la estación Westbahnhof, en Viena, los voluntarios de la Orden de Malta prestan los primeros auxilios a los refugiados llegados en tren. Junto con la Iglesia ortodoxa siria de Viena, la Orden ofrece clases de alemán para facilitar la integración, así como asistencia legal a los solicitantes de asilo. Este mismo proyecto está en curso en otro campo de refugiados en Salsburgo.
Además de la asistencia médica y legal, los voluntarios de la Orden de Malta ofrecen apoyo social y psicológico a las familias de refugiados y a los menores no acompañados, en constante aumento según las estimaciones de Naciones Unidas. Una actividad que permite a los niños y jóvenes distraerse e integrarse mejor a través de actividades deportivas y partidos de fútbol.
Según el último informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en 2014 se ha registrado el mayor aumento del número de refugiados en el mundo. Durante el año pasado, más de 270.000 migrantes entraron en Europa cruzando el Mediterráneo. Una tendencia que se ha agravado en los últimos años debido a los conflictos y las difíciles condiciones de vida en numerosos países de África central y de Oriente Medio.
El trabajo incesante de los médicos y enfermeros del cuerpo italiano de ayuda de la Orden de Malta se prosigue en el Canal de Sicilia, a bordo de las embarcaciones de la Marina militar y de los guardacostas. Desde 2008 estos profesionales atienden a los refugiados que cruzan el mar en barcazas atestadas, procedentes del Norte de África y de Oriente Medio. Desde el 1 de enero de este año, los voluntarios han pasado casi 100.000 horas en alta mar.
Los equipos de la organización de ayuda internacional de la Orden de Malta, Malteser-International-es, están también presentes en el norte de Irak: desde agosto de 2014 han atendido a aproximadamente 45.000 heridos y repartido alimentos y productos de primera necesidad a 10.000 personas. En Líbano, donde se calcula que se han instalado 2 millones de refugiados sirios, la Orden de Malta gestiona varios centros sociosanitarios donde los refugiados reciben gratuitamente tratamiento y fármacos.