La 13ª peregrinación a Roma organizada por la Orden de Malta en Alemania está en marcha. Tras cuatro años de pausa por la pandemia, unas 600 personas, entre ellas doscientas discapacitadas y un centenar en silla de ruedas, han viajado en 15 autobuses diferentes procedentes de diócesis de toda Alemania. Les acompañan voluntarios de Malteser Hilfsdienst de todas las edades: desde jóvenes adolescentes hasta ayudantes cualificados encargados de la logística y la organización de las numerosas visitas que tendrán lugar durante los tres días de estancia.
Tras una misa en la Basílica de San Pablo Extramuros, el grupo se ha desplazado hasta la Villa Magistral, una de las sedes de gobierno de la Orden de Malta, donde ha sido recibido por el Lugarteniente del Gran Maestre, Frey John Dunlap, y el Gran Canciller Riccardo Paternò di Montecupo.
«Estamos muy contentos de que estéis aquí. Como sabéis, acompañar a los peregrinos es la actividad principal de la Orden y lo ha sido desde su fundación hace más de 900 años. Es un placer ver a tantas personas, todos miembros de nuestra gran familia», ha dicho Frey John Dunlap en su bienvenida a los peregrinos, que han podido visitar los jardines de la Villa Magistral mientras admiraban la vista de Roma.
Los peregrinos se desplazan en autobuses escoltados por la policía municipal de Roma, visitando todos los días los lugares de interés del centro de Roma. A lo largo del recorrido, organizado con una sofisticada logística, son muchas las manos que ayudan a superar bordillos, escaleras y adoquines; esto hace que los peregrinos, muchos de los cuales dependen de una silla de ruedas, puedan hacer lo que de otro modo no sería posible.
El grupo visitará mañana algunas de las iglesias más bellas de Roma y el Museo Vaticano, antes de participar en la audiencia general del Papa Francisco el miércoles por la mañana en la plaza de San Pedro.