El servicio de ayuda de la Orden de Malta MMSz envía médicos por toda Hungría, hasta las comunidades aisladas que viven en situación de pobreza extrema. En el asentamiento rom de Monor, al sureste de Budapest, un tercio de los residentes tienen la tensión alta, muchos necesitan urgentemente cuidados dentales y entre el 15 y el 20% de los niños tienen dificultades visuales.

Cada semana, los médicos de MMSz visitan zonas aisladas de Hungría para llevar a las familias atención médica básica, centrándose particularmente en los cuidados de la vista. Durante el último año, más de 1.200 personas en todo el país y en las regiones fronterizas de los países vecinos han recibido asistencia. Se pueden montar clínicas temporales en cualquier lugar aislado, independientemente de la existencia de suministro de agua o electricidad. Los médicos vuelven regularmente a las mismas comunidades para la revisión de los pacientes.

El doctor Laszlo Szalai, jefe de proyecto, explica: “En estas regiones aisladas, y sin poder costearse una cirugía, los discapacitados visuales quedan marginados”. Las consecuencias son especialmente graves para los niños, que sufren dificultades escolares con consecuencias graves para su futuro. En los últimos cinco años el servicio de ayuda húngaro de la Orden de Malta ha repartido gratuitamente más de 3.000 pares de gafas a niños de familias desprotegidas.

Fundado en 1989, el MMSz tiene 5.000 voluntarios regulares y 15.000 voluntarios ocasionales. Dirigido por el Padre Imre Kozma, presidente del servicio de ayuda de la Orden de Malta, el MMSz es hoy en día una de las mayores organizaciones de ayuda en el país, y socio constante de las instituciones húngaras. Cuenta con 350 ramas, 130 grupos de voluntarios, 210 institutos y 1.200 empleados. El MMSz también trabaja en protección civil, son sus propios equipos de asistencia en caso de desastres naturales, en Hungría y el extranjero. Este año ha cumplido 25 años.