Intensa emoción y gran participación en el funeral de Frey Marco Luzzago, Lugarteniente del Gran Maestre de la Soberana Orden de Malta, celebrado hoy en Roma en la Basílica de los Santos Bonifacio y Alessio, en la colina del Aventino.

Escoltado por los caballeros y las damas de la Orden de Malta, el equipo del Cuerpo militar de la Asociación italiana y los voluntarios del Cuerpo de ambulancias italiano, el féretro, cubierto con la bandera de la Orden, se ha trasladado poco después de las 10:30 desde la iglesia de Santa María de Avenltino, en el complejo de la Villa Magistral, donde había quedado instalada la capilla ardiente estos últimos días.

La larga procesión ha acompañado el féretro de Frey Marco Luzzago, fallecido repentinamente el 7 de junio a la edad de 71 años, a través de la puerta principal de la Villa Magistral, con las banderas rojas a media asta, hasta la adyacente Basílica de los Santos Bonifacio y Alexis.

La ceremonia fúnebre, en una iglesia abarrotada, ha sido oficiada por el cardenal Silvano Maria Tomasi, delegado especial del Papa, y concelebrada por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio cardenalicio, y monseñor Jean Laffitte, prelado de la Orden de Malta.

Recordando la amabilidad y la sincera bondad del fallecido, su sonrisa franca y su mirada directa, el cardenal Tomasi ha destacado en su homilía cómo «Frey Marco amaba a Jesús, a la Iglesia y a la Orden. El ejemplo de Frey Marco prueba que el amor a Jesucristo transforma la vida en un servicio incondicional y sin límites. Este amor en Frey Marco ha marcado su existencia, su servicio a la Orden en la Iglesia y su camino personal de la fe, impregnado de oración y acción». «Su amabilidad, el rasgo de un hombre sencillo y cabal, piadoso, humilde, devoto, fiel al Papa y enamorado de la Orden, que mantuvo con humildad y espíritu de servicio en estos tiempos de tribulaciones y aguas turbulentas. Su honestidad debe ser un ejemplo para todos, especialmente para quienes ostentan responsabilidades», ha proseguido el cardenal, invocando la paz eterna para Frey Marco, a través de las palabras del Papa Francisco.

Durante su mandato de menos de veinte meses al frente de la Orden, marcado primero por la pandemia y luego por las labores de ayuda tras la guerra de Ucrania, Frey Marco Luzzago había conseguido llegar al corazón de quienes trabajaban con él y le habían acompañado por los pasillos del Palacio Magistral. Un lugar muy querido para él, pero también tan distante de la Encomienda de la Orden en Las Marcas. Esa Villa Ciccolini que administró y en la que vivió durante tantos años. Asimismo, en las ocasiones en las que viajó como Lugarteniente, como hace unas semanas al comedor social de la Orden de Malta en Pompeya o durante su última peregrinación a Lourdes, Frey Marco fue apreciado por su generosidad, espiritualidad y dedicación, reflejo de su «luminoso testimonio cristiano», en palabras del Papa Francisco.

Al funeral han asistido el Lugarteniente ad interim de la Soberana Orden de Malta, Frey Gonçalo do Valle Peixoto de Villas-Boas, los miembros del Consejo Soberano, la familia de Frey Marco Luzzago y los representantes de los Grandes Prioratos, Subprioratos, asociaciones nacionales, misiones diplomáticas y cuerpos de voluntarios de la Orden de Malta en todo el mundo. Junto a ellos, los embajadores de los países con los que la Orden mantiene relaciones diplomáticas, autoridades civiles y religiosas.

El funeral se ha retransmitido en directo en el canal YouTube de la Orden de Malta, permitiendo así a los miembros y los voluntarios en todo el mundo seguirlo y participar en directo en el último saludo a Frey Marco Luzzago. Son cientos los mensajes de condolencia que siguen llegando al Gran Magisterio para expresar el pésame por el fallecimiento del Lugarteniente.

Los familiares acompañarán mañana el féretro de Frey Marco Luzzago hasta Brescia, donde será enterrado en la sepultura familiar.