Según las últimas informaciones del gobierno de Guatemala, el balance de víctimas de la erupción el pasado domingo del volcán Fuego, situado a 35 kilómetros al suroeste de la capital Ciudad de Guatemala, asciende a 109 personas.
Se cuentan también 200 desplazados y centenares de heridos, algunos muy graves. Más de 12.000 personas han sido evacuadas. La Asociación guatemalteca de la Orden de Malta, que intervino inmediatamente cuando se declaró la emergencia, ofrece su apoyo a unos 500 desplazados.
La diócesis de Escuintla, la zona más golpeada por la erupción volcánica, ha confiado a la Orden de Malta la gestión de 3 de los 33 refugios organizados. Dos clínicas móviles de la Orden dan asistencia médica y apoyo psicológico a las personas que han perdido a familiares o sus hogares. Se ha distribuido también a la población bienes de primera necesidad, alimentos y productos de higiene.
La organización de ayuda internacional de la Orden de Malta, Malteser-International-es, presta también ayuda de emergencia a las víctimas, y ha lanzado una colecta de fondos.
El panorama es dramático: se prevé que los refugiados deberán permanecer en las tiendas de campaña entre 9 y 12 meses.
El Gran Maestre de la Orden de Malta, Frey Giacomo Dalla Torre, ha querido expresar su cercanía para con las víctimas y el país centroamericano, enviando una carta al presidente de Guatemala, Jimmy Morales, y a la Asociación guatemalteca de la Orden.