Los flujos migratorios, la inestabilidad en Oriente Medio, el repunte de movimientos xenófobos y los retos a los que se enfrenta la Unión Europea: he aquí algunos de los temas tratados por el Gran Canciller de la Soberana Orden de Malta, Albrecht Boeselager, durante su reunión con los embajadores de países europeos. Todos los embajadores están acreditados ante la Santa Sede, y muchos de ellos también ante la Soberana Orden de Malta. La reunión, organizada por el embajador austriaco Alfons Kloss, ha tratado algunas de las cuestiones más graves a las que se enfrenta actualmente la diplomacia internacional.
Entre ellas se cuenta la crisis humanitaria en Libia, donde según las estimaciones existen 250 focos ilegales. El Gran Canciller ha explicado el papel de la Orden de Malta en la formación de los guardacostas libios: desde 2016 se han celebrado cuatro sesiones de formación, en las que se ha preparado a más de 200 oficiales de la guardia costera y la Marina libia en labores de búsqueda y rescate y en primeros auxilios médicos. El cuerpo de ayuda italiano de la Orden de Malta trabaja en primera línea con operaciones de rescate desde que estalló la crisis migratoria en el Mediterráneo.
Boeselager ha detallado la acción global y extensa de la Orden de Malta en materia migratoria: apoyo jurídico, proyectos de integración y enseñanza, primeros auxilios en prácticamente todas las rutas, asistencia médica en los campos de refugiados de Turquía, Líbano, Irak o Uganda, entre otros.
Con este mismo espíritu, la red diplomática de la Orden participa en el proceso que llevará al Pacto Mundial sobre Migración y Refugiados en Naciones Unidas en Nueva York y Ginebra. Con el nombramiento de dos embajadores plenipotenciarios de lucha contra el tráfico, la Orden de Malta se compromete a aumentar el compromiso de las organizaciones internacionales en el ámbito del tráfico de seres humanos, y trabaja con las autoridades africanas.
En torno a este tema específico, el Gran Canciller se ha reunido hace unos días con monseñor Sánchez Sorondo, Canciller de la Academia Pontificia de Ciencias y de Ciencias Sociales, confirmando la sólida colaboración existente entre la Santa Sede y la Orden de Malta.