La OMS ha declarado emergencia de salud pública internacional el nuevo brote

Tras el anuncio de la Organización Mundial de la Salud el 17 de julio, que ha declarado el brote de ébola en República Democrática del Congo como una emergencia de salud pública internacional y ha avisado de una posible expansión del virus en toda la región, Malteser-International-es ha intensificado sus programas de prevención regional. La organización de ayuda internacional de la Orden de Malta trabaja en la República Democrática del Congo desde 1996 y ha colaborado en los esfuerzos de contención del virus Ébola, trabajando con el Ministerio de Sanidad local y con el apoyo del Ministerio Federal de Asuntos Exteriores alemán.

«Estamos montando una unidad de aislamiento en Ariwara, en el noreste, para evitar una mayor propagación del virus», afirma Roland Hansen, coordinador para África de Malteser-International-es. «Un paciente, que desgraciadamente falleció, viajó casi 500 km desde Beni a Ariwara, en transporte público. Hay muchas posibilidades de que otras personas también se hayan infectado. Debemos intensificar nuestros esfuerzos para controlar la epidemia.»

En estrecha colaboración con el Ministerio de Sanidad congoleño y la Organización Mundial de la Salud (OMS), Malteser-International-es se esfuerza por mejorar la higiene y la prevención y control de infecciones en la región. «Repartiremos trajes de protección a los hospitales y montaremos puestos de exploración y unidades de aislamiento en lugares públicos. Nuestros trabajadores especializados en Ariwara toman la temperatura de las personas en zonas públicas y en carreteras que conducen a la ciudad, para identificar a personas que muestren síntomas compatibles con la enfermedad y transferirlos a hospitales para su tratamiento», afirma Hansen.

Los equipos de Malteser-International-es también realizan actividades de promoción de la salud y refuerzan la implicación de las comunidades. «Nuestros programas de radio, por ejemplo, buscan sensibilizar a las comunidades sobre el ébola. Además, hemos instalado estaciones de lavado de manos en lugares de gran afluencia. De esta manera podemos evitar que la epidemia llegue a lugares libres de ébola», explica Hansen.

La epidemia de ébola en la República Democrática del Congo empezó hace un año, con los primeros casos confirmados en agosto de 2018. En las provincias orientales de Kivu del Norte e Ituri, 2.522 personas se han contagiado desde julio de 2018 y 1.698 han fallecido. Los equipos de emergencia han tenido bastantes dificultades para luchar con eficacia contra el brote, en parte debido a la violencia constante en la región.

La epidemia de ébola que devastó regiones enteras de África occidental de 2014 a 2016 acabó con la vida de más de 11.000 personas.