La labor de la Orden de Malta en la República Democrática del Congo
Por desgracia la República Democrática del Congo ocupa el primer puesto en número de violaciones cometidas contra la población civil. En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, los datos de Naciones Unidas ponen de relieve que en el Congo se cometen al mes 1.100 violaciones, una media de 36 al día.
La Soberana Orden de Malta opera en la zona oriental de la República Democrática del Congo desde 1996. Allí gestiona diversos proyectos médicos, educativos, agrícolas y sociales destinados a mejorar las condiciones de vida de la población, a menudo al límite de la supervivencia. En los últimos 10 años muchos de los esfuerzos han estado encaminados a ofrecer asistencia médica y psicológica a las víctimas de violaciones. Gracias a Malteser-International-es, su agencia de ayuda internacional, la Orden ha atendido ya a cerca de 50.000 mujeres víctimas de agresiones y violaciones.
Perpetrada por milicianos en esta zona de África, la violencia sexual a gran escala es utilizada como arma de guerra, con el objetivo de humillar y aterrorizar a la población, provocando daños sociales irreparables.
En la zona nororiental del país operan 64 centros médicos, en las regiones del Alto Uele y Kivu del Sur. Además de la asistencia médica, que incluye profilaxis post exposición para reducir el riesgo de infección por VIH, la Orden de Malta se centra en campañas de concienciación para favorecer la reinserción social de las víctimas de estas dramáticas experiencias, a menudo marginadas y alejadas de sus propias familias, condenadas a la soledad y el aislamiento.
La asistencia integra el tratamiento médico básico, normalmente aportado por Malteser-International-es, con apoyo psicológico, incluidas visitas a domicilio para llegar también a los casos más graves y para repartir fármacos. Estas actividades se desarrollan en estrecha colaboración con los hospitales locales.
Son de señalar también las iniciativas de reinserción laboral, que pretenden dar a estas mujeres la posibilidad de ser económicamente independientes.
Foto: Malteser-International-es
