Durante los seis últimos años, Malteser-International-es, el servicio de ayuda humanitaria internacional de la Orden de Malta, ha venido ofreciendo tratamiento psicológico y médico a cerca de 49.000 mujeres víctimas de agresiones, violaciones y otras atrocidades en la provincia de Kivu del Sur, una región situada al este de la República Democrática del Congo. “La violencia sexual afecta a niñas y mujeres de todas las edades”, afirma Ursula Salesse, Responsable de proyecto de Malteser Internacional. “Incluso niñas de tres años y ancianas de 70 años son víctimas”.
Malteser-International-es gestiona en Kivu del Sur 64 centros sanitarios, donde las niñas y las mujeres reciben tratamiento médico para las enfermedades de transmisión sexual y un tratamiento profiláctico contra la infección por VIH. Malteser-International-es colabora estrechamente con 52 grupos locales y sus 570 miembros. “A menudo son las propias mujeres víctimas de estas agresiones las que trabajan en estos grupos”, afirma Ursula Salesse. Además del tratamiento médico, las mujeres reciben tratamiento psicológico, de gran importancia. El hablar con psicólogos les ayuda a procesar sus experiencias y a tratar el trauma.
El impacto de una violación, no obstante, no es sólo médico o psicológico. En muchos casos, la mujer queda excluida de su propia familia. “Por ello, los miembros de nuestros grupos locales hablan también de la violación y su impacto en mercados, y otras zonas públicas. Pretenden así convencer a la gente de ocuparse de las víctimas, y evitar el castigo suplementario de la expulsión”, explica Ursula Salesse.
Malteser-International-es trabaja desde 1996 en el noreste de la RDC, en Kivu del Sur e Ituri del Norte. Con 127 trabajadores locales y 10 trabajadores internacionales, desarrolla sus actividades en los campos de salud y nutrición, reconstrucción y rehabilitación de las infraestructuras, y ofrece ayuda de emergencia a los desplazados internos.