Tras dos años de exámenes médicos en las regiones más pobres de Hungría, los médicos de la Orden de Malta han constatado que cada vez más personas de comunidades aisladas y marginadas se encuentran fuera del alcance de la atención sanitaria institucional. Según las estimaciones, 20% de los niños que viven en zonas desfavorecidas tienen trastornos visuales. En respuesta, el servicio de asistencia húngaro de la Orden de Malta ha lanzado un programa especial llamado “¡Ponte las gafas y mira!”, que hasta la fecha ha donado más de mil gafas a niños desfavorecidos con deficiencias visuales.
Los médicos de la Orden de Malta aplican este mismo proyecto fuera de Hungría. En los asentamientos de origen húngaro de Moldavia, Rumanía, 250 escolares han pasado revisiones oculares a principios de octubre. Los resultados señalaron la gran importancia de realizar este tipo de exámenes: el 5% sufría de deficiencias visuales irreversibles debidas a la falta de un diagnóstico temprano. Las revisiones revelaron también que casi la mitad de los niños examinados necesitaban gafas. A finales de octubre, la Orden de Malta pudo volver a Rumanía y regalar a los niños 107 gafas nuevas.