Prevención y asistencia en catástrofes
Ayuda de emergencia y desarrollo sostenible a largo plazo
Cada año fallecen aproximadamente 90.000 personas por desastres naturales. Los afectados por terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas, avalanchas, huracanes, inundaciones, incendios, sequías y olas de calor superan los 160 millones. Tan solo en 2020 han ocurrido 400 desastres naturales, y las regiones asiáticas son las principales afectadas.
Con sus programas de reducción del riesgo de desastres, la Orden de Malta pone en marcha medidas para asegurarse de que las comunidades estén preparadas frente a un posible desastre, centrándose en particular en las personas que más dificultades tienen para escapar: los ancianos y los discapacitados.
Las últimas intervenciones de emergencia han tenido lugar en Indonesia tras el terremoto y el tsunami de septiembre de 2018, en en Nepal después de los graves seísmos, en Filipinas tras el tifón Haiyán, en el Cuerno de África golpeado por la hambruna y en toda Europa, donde nuestros cuerpos de voluntarios reaccionan en caso de inundaciones o fenómenos meteorológicos extremos. Están en curso proyectos de desarrollo sostenible a largo plazo en Haití, el país más pobre del hemisferio occidental y el segundo en densidad de población.